Comunidad Swinger: Consejo de expertos en la Guía para principiantes sobre el intercambio de parejas
Mientras que una relación monógama es lo habitual para la mayoría de las parejas, a otras les gusta explorar las relaciones abiertas para dar sabor a su vida sexual. Dar el primer paso en el "estilo de vida swinger" puede ser muy divertido para las parejas casadas, las que mantienen relaciones tradicionales y los solteros que simplemente quieren disfrutar de la experiencia de tener más de una pareja. Si estás interesado en sumergirte en el mundo swinger, sigue leyendo para conocer algunas explicaciones y consejos para los novatos del swinger.
¿Qué significa el término "Swinger"?
Sinceramente, hoy en día el término "Swinger" está considerado por algunos un poco anticuado. La gente piensa en Austin Powers, ("Swinger Baby, yeah!") los años sesenta y el aumento de la libertad sexual. Hoy en día, la práctica de tener más de una pareja sexual también se conoce como "no monogamia consensuada" (CNM). Ahora bien, si eso suena un poco políticamente correcto, otro término popular utilizado como alternativa a Swinger, especialmente entre los menores de 35 años, es "relación abierta". Dicho esto, como nadie se refiere al "estilo de vida de la no monogamia consensuada" o a los "clubes o fiestas de relaciones abiertas", vamos a ceñirnos a los términos Swinger / Swinging a efectos de este artículo.
El swinging se define mejor como una práctica sexual en la que las parejas que tienen una relacion estable no monógamas disfrutan intercambiando parejas con otras parejas y solteros.
Esto puede implicar lo que se denomina "intercambio suave" o "intercambio duro". Un intercambio duro incluye una variedad de actividades sexuales, incluyendo el coito. En cambio, el intercambio suave no llega a la penetración, pero incluye estimulaciones manuales, besos, coqueteos, caricias y, a veces, sexo oral.
En el intercambio de parejas, existe el intercambio duro "full swap"(o intercambio completo) y el intercambio suave "soft swap". El intercambio duro incluye todo tipo de actividades sexuales, incluido el coito. Pero el intercambio suave no llega a la penetración y suele incluir estimulación manual, coqueteo, caricias, besos y, potencialmente, sexo oral. Estas actividades pueden ser espontáneas, es decir, se conoce a otras personas en un bar o club y se hace, o planificadas, es decir, se elige conocer primero a las posibles parejas en línea, como en esta web, para ver si hay una conexión antes de acordar un encuentro en persona.
Las personas que mantienen relaciones swinger con éxito afirman que aumentan la calidad y la cantidad de los encuentros sexuales, no sólo fuera de la relación con su pareja, sino también dentro de ella. Los swingers afirman que la práctica produce una conexión emocional y física reforzada con su pareja.
La práctica del Swinging no debe confundirse con el poliamor. El poliamor es otra forma de relación abierta pero esta vez en la que los participantes tienen fuertes vínculos románticos entre sí. El Swinging es la práctica de tener múltiples parejas sin que se involucren sentimientos románticos (permitidos).
Consejos esenciales para principiantes Swingers
Mis consejos esenciales para ayudar a guiar con éxito a los novatos en el estilo de vida swinger:
- Habla abiertamente con tu pareja.
El componente esencial para una relación swinger exitosa es la comunicación clara entre la pareja. Ambos deben sentirse cómodos para socializar sexualmente con otras personas y confiar al 100% el uno en el otro. Para que el intercambio de parejas funcione, no debe haber ningún sentimiento de celos al ver a tu pareja con otra persona. Asegúrate de que ambos os sentís cómodos con el concepto de "compartir" y de que os sentís seguros en vuestra relación antes de embarcaros en vuestro primer encuentro.
- Acuerda sobre lo que Excita... y lo que No
Para que el intercambio de parejas funcione para ambos, es conveniente establecer unas reglas básicas claras desde el principio. Hablad de lo que ambos queréis de la experiencia, de lo que os excita, de hasta dónde estáis dispuestos a llegar y de lo que está "fuera de los límites". A algunas parejas les gusta empezar con un trío, a otras con un intercambio suave, a otras con un intercambio completo en la misma habitación y otras prefieren tener sexo casual sin que su pareja esté presente y luego discutir la experiencia de intercambio. La clave es el acuerdo mutuo con tu pareja sobre lo que te sientes o no te sientes cómodo haciendo.
- Más información sobre el estilo de vida Swinger
Para facilitar el acceso a este estilo de vida, infórmate sobre el mismo antes de embarcarte en tu primera experiencia. Aprende sobre los diversos términos swinger y la etiqueta utilizada en los círculos swinger. Descubre cosas que no conocías y quizás nuevas experiencias que te gustaría explorar y probar. En cualquier caso, un poco de preparación nunca está de más y aumentará tu conocimiento/confianza y disminuirá cualquier sensación inicial de nerviosismo que puedas tener.
- Empieza en Línea, no en un Club Swinger
Levantarse una mañana y decidir "esta noche vamos a ir a un Club de Swingers", no es la manera de empezar. Es mejor tomarse las cosas con calma al principio y empezar en línea, donde tienes mucho más control de todo el proceso. Si tú o tu pareja os sentís incómodos en algún momento es fácil parar y simplemente cerrar el portátil, en lugar de tener que escapar de un club lleno de swingers cachondos.
Hay muchos sitios de citas para swingers. Una de mis favoritas es la Comunidad Swinger de SoloAdultosDating. Esta consolidada página es gratuita, es muy popular (por lo que hay muchos miembros para elegir) y tiene una sensación de comunidad amigable. Puedes personalizar tu perfil para atraer a la gente que quieres conocer, buscar swingers locales, ver los perfiles y las fotos de los miembros y mucho más, todo ello de forma gratuita. El enfoque de "primero en línea" también te permite ver qué tipos de parejas y personas solteras te resultan atractivas y discutir tus sentimientos sobre toda la experiencia swinger en el proceso.
- Conócete antes de salir a ligar
Una vez que hayas encontrado a tu compañero de juego perfecto en Internet, te sugiero encarecidamente que, al principio, te reúnas sólo socialmente. Esto permite que todos puedan charlar y conocerse un poco más y ver si todos encajan. Si no lo hacéis, podéis ir cada uno por su lado, pero si lo hacéis, os aseguro que esto sólo aumenta la tensión y la excitación sexual. Una vez más, habla con tu pareja sobre cómo te sientes después, ya que sólo si el sentimiento es mutuo deberías aceptar pasar a la fase de conexión.
- Tu primera experiencia
Suponiendo que todo vaya bien después de tu encuentro social, entonces es el momento de organizar tu primera experiencia de intercambio de parejas o trío. Cuando no te sientes cómodo intercambiando en casa, muchas parejas reservan una habitación de hotel para esa noche haciendo esa ciata más especial (recomendado). Aunque es normal sentir mariposas en el estómago la primera vez, puedes estar tranquilo porque será con alguien que has elegido personalmente y también has conocido un poco antes. De este modo, maximizarás las posibilidades de que tu primera experiencia sea estupenda.
- Ten siempre una Señal
Las personas que son nuevas en la escena swinger pueden encontrar que en el calor del momento que de repente se sienten incómodos o nerviosos para continuar. Como en todas las primeras experiencias, esta es una reacción natural y no hay que avergonzarse de ella. Prepara una señal o palabra clave con tu pareja de antemano. Esto te permitirá comunicar a tu pareja cómo te siente. Las señales o palabras en clave tienen muchas ventajas en estas situaciones exaltadas. Pueden usarse para indicar que quieres parar o simplemente frenar un poco las cosas. A la inversa, pueden utilizarse para hacer saber a tu pareja que estás disfrutando y que quieres continuar.
- Juega con responsabilidad
Practica siempre el sexo seguro cuando practiques el intercambio de parejas. Utiliza preservativos y barreras bucales, y comprométete a hacerte pruebas periódicas de enfermedades de transmisión sexual (ETS). Lo mismo ocurre con cualquiera de tus compañeros de juego. Tu salud y la de los demás es demasiado importante, así que juega siempre con responsabilidad.
- Únete a una Comunidad Swinger
Suponiendo que tu primera experiencia haya ido bien, y que ambos querais repetir, entonces únete a una comunidad swinger, como ésta. Cuando se empieza, es mucho más fácil y seguro concertar encuentros posteriores con personas afines a ti que puedes conocer y charlar también online antes de decidir si quieres quedar en la vida real. De nuevo, esto te permite controlar el proceso de decisión y te ayuda a asegurar que tus potenciales compañeros de juego son exactamente lo que estás buscando.
- Visita un club Swinger
Una vez que hayais tenido varias experiencias positivas y ambos sintais que el estilo de vida swinger es algo para vosotros, entonces considerad visitar un club o evento swinger. Busca en Internet cosas como "clubes swinger cerca de mí" y luego mira qué noches o eventos temáticos son de interés. Lee siempre las reseñas para hacerte una idea del club y sus políticas. También puedes pedir recomendaciones a la gente del sitio comunitario al que te has unido. La primera visita a un club/evento de intercambio de parejas puede ser un poco "intensa" para los principiantes, por lo que es posible que quieras asistir y hacerte una idea de lo que ocurre sin participar. También puedes ir con otra pareja que hayas conocido previamente para jugar todos juntos.
En conclusión, si la idea de experimentar con diferentes parejas y unirse al estilo de vida swinger te atrae, hazlo. Habrá que superar algunos retos, pero esperamos que estos consejos sean de ayuda. Ten la seguridad de que el número de parejas y solteros que adoptan las relaciones abiertas o no monógamas está creciendo rápidamente. Estas personas se dan cuenta de que sus relaciones se fortalecen y prosperan dentro de un estilo de vida más liberado sexualmente. Si esto te parece atractivo, inténtalo.
UNA HISTORIA DE MISS LOLA
Richard
Había entrado el invierno pero aún podía ver cómo las últimas hojas de los árboles caían sutilmente sobre la hierba. No podía dejar de pensar en Richard, el amigo de mi hermano. Cada vez que visitaba a mi hermano lo espiaba sigilosamente desde el pasillo. Esa mirada, esos labios y esa sonrisa me volvían loca...
Un día después del partido de Rugby, Richard se quedó a dormir en casa porque al día siguiente se iban de excursión a la montaña. En la cena me pilló mirándole la boca y me sonrió dulcemente. Un detalle sutil que me hizo, sin darme cuenta, mojar mis braguitas. Por la noche me levanté porque no me podía dormir, lo vi allí sentado y me preguntó:
- ¿Tú tampoco puedes dormir?
Me senté a su lado, estaba ardiente de deseo, ese deseo que había estado contenido durante tanto tiempo...Tenía su mano sobre mi pelo, su lengua provocando cada rincón de mi boca, su cuerpo presionando todo mi cuerpo...creía que me iba a desmayar en cualquier momento a la vez que mi cuerpo no paraba de arder de pasión. Poco a poco me empezó a quitar la camiseta, que era lo único que cubría mi parte de arriba. El roce de sus dedos por mis pezones hizo recorrer un escalofrío por todo mi cuerpo hasta mi entrepierna. El cómo sus labios y su lengua acariciaba el recorrido desde la comisura de mi boca, pasando por todo mi cuello y terminando en mis pezones estaba enviando una sensación ardiente y desgarradora a mi entrepierna que estaba cada vez más húmeda...podía sentir como una gota de mi propio manantial recorría toda mi pierda muy lentamente. Él lo notó y me sonrió pícaramente. De repente me cogió fuertemente los muslos y me enganchó a su tronco superior mientras me besaba apasionadamente y me llevaba a mi propia habitación. Tras cerrar la puerta me empotró contra la pared y comenzó a bajarse el pantalón y a presionar su miembro contra mi entrepierna activando al máximo mi deseo. Mientras me levantaba las manos y seguía lamiendo cada centímetro de mis pechos me dijo:
- Hasta que no me supliques no voy a parar.
Repentinamente me tiró sobre mi cama y comenzó a bajar muy lentamente hasta dónde más lo necesitaba, parándose detenidamente en besar, lamer y acariciar mis muslos y mis labios hasta que no pude aguantar más y presioné con mis manos su cabeza contra mi humedad. No puedo describir el placer que sentí con cada embestida que recibía cuando su lengua recorría el surco entre mi clítoris y mi entrada. Después de unos minutos no me pude contener más, mi interior me pedía a gritos que me penetrara. Se lo supliqué y me penetró lenta y apasionadamente. Mi mirada se perdía en la suya, mis gemidos se perdían dentro de su boca mientras le arañaba la espalda de placer y deseo.
Esa noche larga y que nunca olvidaré.