Soy un hombre heterosexual y me encantan las mujeres.
Una noche cuando iba para mi casa, vi esperando el autobús a una chica delgada, muy blanquita de piel y tetas muy grandes. Yo sabia que por allí se ponían algunos travesti. Di la vuelta con el coche hasta dirigirme a ella, bajé la ventanilla, la saludé, se levantó, llevaba una falda muy corta y una blusa muy pegada. Le pregunté cuanto cobraba y si era chico. Me dijo que sí y que la chupaba muy bien. Por morbo y curiosidad le dije que perfecto, pues su tarifa era económica. Subió a mi coche y me dijo que me metiera en una de las calles, era solitaria y oscura. Me bajé el pantalón sacando mi polla, me preguntó si quería que me la chupaba con condón, le dije que al natural y ahí comenzó a chupármela.
Después de un rato me comentó:
-Estamos incómodos, te invito a continuar en mi casa que está muy cerca.
Me gustó la idea. Llegamos a su casa y me pasó a un cuarto pequeño, solo tenía un banco, me dice " quítate la ropa"..., lo hice y me quedé totalmente desnudo. En el trayecto mi pene había perdido su erección. Puso una toalla en el suelo y se puso de rodillas, me tomó de la cintura y acarició mis piernas, me empujó hacia ella, mi pene flácido quedó a la altura de su boca, sin dejar de acariciar mis piernas, abrió su boca y se metió mi pene, movía la cabeza de tal manera que gozaba mucho como sentía mi polla entrar y salir de su boca, al poco tiempo mi pene estaba tan duro como una roca, tenía razón, la chupaba muy bien, su lengua hacia maravillas en mi pene. Después hizo que me diese la vuelta, metió su mano entre mis piernas para tirar de mi polla hacia atrás y así lamérmelo al igual que hizo con mis testículos,... mmmm casi llego al éxtasis de placer.
En eso sentía como me abría las piernas y su lengua lamía mi ano, nunca me habían dado un beso negro y ella sabia darlo muy bien. Me encantó, mientras me chupaba el ano, con la otra mano me acariciaba los testículos, hacía tiempo que no sentía tanto placer.
En ese momento lo único que quería era follármela, hicimos un parón, ella fue hacia su bolso y sacó un preservativo, me lo puso, entonces se quito la falda y la blusa, quedando totalmente desnuda. La miré y estaba totalmente depilada con un polla flácida, más pequeña que la mía, se puso contra la pared separando sus piernas, su culo estaba a mi disposición. Empecé a dale unas palmadas en su culito y en sus nalgas. Le di con mi pene en su ano, empecé poco a poco hasta que entró la puntita, mientras la acariciaba sus tetas. Después empujé más y más hasta que mi polla ya estaba metida en su culo. Me quede quieto sintiendo mi pene dentro de ella.
Nunca pensé que estar con un trans fuese tan placentero, a pesar de estar con un hombre yo sentía que estaba follándome a cualquier chica con las que había tenido sexo antes.
Yo seguía super caliente ,empecé a acariciarlo y a tirarle del pene, era raro para mí, pero me gusto hacerlo. Su polla empezó a ponerse durísima ,mientras yo le lamía los testículos, mientras los dos disfrutábamos.
Muy caliente, empecé a acariciarlo y a tirarle, era raro pero me gustó hacerlo, mis tirones provocaron que su pene se pusiese duro, tanto pene como testículo ya se los agarraba sin temor, ambos disfrutábamos. Tenia ganas de correrme pero quería un poco más, me abrazó y nuestros penes erectos chocaron, se agachó un poco para besar mi pecho, mi abdomen y de nuevo mi polla, hincándose para chuparla mejor, después se levantó y me hizo que me hincara. Puso mis manos en sus piernas, su pene estaba a la altura de mi cara, lo fue acercando poco a poco, tenia su pene muy cerca de mi rostro, sin decir nada me imagine lo que quería, pero dudaba hacerlo, una cosa era cogérmelo pensando en que era mujer y otra mamar un pene, ella notó mi duda, colocó sus manos en mi cabeza masajeándola, tranquilizándome, acercó más su pelvis hacia mí y su pene tocó mis labios, no hice nada por quitarme y ella movió ligeramente su cintura tallado su pene en mis labios, así empecé a besar la punta torpemente, para después besar el tronco, cuando me di cuenta ya todo su pene estaba en mi boca, nunca pensé en chupar una polla, lo hacía torpemente y la chupaba al natural, su sabor era extraño pero no desagradable, tanto mi pene como el suyo estaban totalmente erectos, después de varios minutos se separó y me puse de pie, me cogió la cabeza me agachó y me tiró en la cama, a continuación me puso a cuatro patas empezó a penetrarme, disfrutaba como me penetraba, tanto ella como yo ya no aguantamos más, nos apartamos y nos pusimos de frente, se quitó el condón y nos masturbamos mutuamente, eyaculamos al mismo tiempo, mi polla con su semen y ella con el mío, fue una experiencia grandiosa.
He follado con novias, amigas, primas, pero ninguna me la ha chupando tan rico como tú Paty, la putita trans con la que me encanta follar.